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Víctor Andrés Belaunde termina su encendido discurso en la Casona de San Marcos (1914) con una exclamación cuyo eco llega a nuestros días: ¡queremos Patria! Lo que dijo entonces recobra dramática actualidad en nuestros días: el estancamiento económico de nuestro país es reflejo de una crisis política, punta de iceberg de una lacerante crisis moral. Mientras nos debatimos en dimes y diretes, comisiones investigadoras, conflictos sociales que enrarecen la confianza social, nos cae como agua de mayo el triunfo de Gladys Tejeda en Toronto. Una noticia que nos devuelve la fe y nos muestra el rostro amable del Perú emprendedor que todos deseamos en estas fiestas patrias. Sigue leyendo